"Papá, mamá: Me aburro ¿Qué hago?". Seguro que la frase le resulta
familiar, que la ha oído por boca de su hijo cientos de veces y ahora en
verano, aún más. Pero no debemos satisfacer sus deseos, ni darles algo
con lo que jugar o pasar el rato. Que investiguen ellos, que averigüen e
inventen qué hacer cuando no tienen nada qué hacer....
FUENTE: El Mundo 06-07-2016